El Ministerio Público (Fiscalía) de Guatemala arremetió este viernes nuevamente en contra del partido socialdemócrata Semilla, en busca de evitar que participe en la segunda vuelta electoral el próximo 20 de agosto, mientras crecen las críticas en su contra a todo nivel.
La entidad que dirige la fiscal general, Consuelo Porras, sancionada por Estados Unidos, allanó este viernes la sede de Semilla y mantiene en firme sus intentos de suspender al partido del candidato presidencial, Bernardo Arévalo de León, de la segunda vuelta electoral el 20 de agosto.
Arévalo de León consiguió avanzar al balotaje después de obtener sorpresivamente el segundo lugar en los comicios del pasado 25 de junio, por detrás de la ex primera dama Sandra Torres, mientras las encuestas lo colocaban en un séptimo u octavo lugar.
El allanamiento es la tercera acción de este tipo por parte del Ministerio Público desde que informó el 12 de julio que pretendía cancelar a Semilla por un presunto caso de corrupción durante su formación en 2018.
Dicha acusación, sin embargo, ha sido catalogada por Semilla como un “golpe de Estado técnico” y por varios expertos como un intento por derribar al partido y evitar que gane las elecciones presidenciales.
PREOCUPACIÓN EN EL EXTERIOR
Estados Unidos subió el tono con respecto a Guatemala este viernes al indicar desde Washington que la Fiscalía intenta “socavar la voluntad del pueblo guatemalteco” con el allanamiento de la sede de Semilla, un gesto que consideró propio de “dictaduras” como la de Nicaragua.
“Usar las instituciones judiciales de forma arbitraria y política son acciones que usan los Gobiernos autoritarios, no solo en Latinoamérica sino en otras partes del mundo. Lo vemos en Cuba y Nicaragua. Forma parte del manual de las dictaduras”, dijo a EFE un alto funcionario del Gobierno de EE.UU. bajo condición de anonimato.
El Gobierno de Joe Biden está dando seguimiento a este tema “muy de cerca” y considera “muy preocupantes” los esfuerzos del Ministerio Público para “socavar la voluntad del pueblo guatemalteco de elegir a sus propios líderes”, dijo el alto funcionario.
Por su parte, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó su preocupación por las “injerencias” en el proceso electoral en y pidió al Gobierno que preside Alejandro Giammattei respetar la separación de poderes.
En un comunicado, la CIDH urgió al estado guatemalteco a evitar “injerencias indebidas” en el proceso electoral y señaló que existe una “falta de independencia” tanto en el Ministerio Público como en la fiscalía general del país.
Mientras tanto, la segunda vuelta electoral permanece programada para el 20 de agosto, respaldada por la Corte de Constitucionalidad, máximo tribunal del país centroamericano, que ordenó este viernes el respeto a la voluntad electoral, como ya había reiterado en un fallo del 13 de julio.
Sin embargo, desde varios sectores, incluyendo Semilla, esperan nuevos ataques por parte del Ministerio Público y de Giammattei, quien está detrás de la fiscal general, de acuerdo al candidato presidencial Arévalo de León.
La agrupación Semilla nació de las manifestaciones contra la corrupción registradas en el país centroamericano durante 2015 y que culminaron con la caída del Gobierno de Otto Pérez Molina (2012-2015), actualmente en prisión.
Fuente: Swissinfo