El ministro de Economía de Argentina, Sergio Massa, anunció hoy martes la entrega de una asignación para mejorar el ingreso de unos 2,8 millones de trabajadores informales, en el marco de las múltiples medidas para contrarrestar el impacto de la devaluación del peso y de la inflación en el país suramericano.

Massa, acompañado de la directora Ejecutiva de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), Fernanda Raverta, informó que la medida consta de dos bonos de 47.000 pesos (134 dólares según el tipo de cambio oficial) que serán asignados en octubre y noviembre próximo.

“La decisión del Fondo Monetario Internacional (FMI) de imponerle a Argentina una devaluación, generó en enormes sectores de nuestra sociedad situaciones de pérdida de poder adquisitivo y algunas situaciones de dolor en términos económicos”, expresó el titular de la cartera económica desde la sede del Palacio de Hacienda en la ciudad de Buenos Aires (Capital Federal).

El también candidato presidencial por el oficialismo indicó que la nueva medida se enmarca en un conjunto de políticas generadas desde el Ejecutivo para proteger el poder adquisitivo de la población argentina ante la devaluación oficial del peso, la moneda local, y ante la escalada inflacionaria.

La titular de la ANSES señaló, por su parte, que ambos bonos abarcarán a personas con trabajo no registrado, en edades comprendidas entre 18 y 64 años y que no están alcanzados “por ninguna prestación o asistencia del Estado”.

Por otra parte, Massa indicó que los recursos dirigidos a la nueva asignación no prevén generar un mayor déficit fiscal.

“Pretendemos mantener el equilibrio en las cuentas públicas, pero llegar a los sectores más vulnerables de la sociedad”, manifestó.

En ese sentido, explicó que los fondos provendrán del cobro de un anticipo extraordinario de impuesto a las ganancias “a los grandes ganadores de la devaluación impuesta por el FMI”, señalando a bancos, compañías financieras y compañías de seguros.

Tras la fuerte devaluación que atravesó Argentina desde mediados de agosto pasado, luego de las elecciones primarias, el Ejecutivo ha resuelto una serie de medidas destinadas a proteger la capacidad adquisitiva de la población.

Entre las resoluciones más importantes destacan la asignación de una “suma fija” equivalente a unos 86 dólares para trabajadores que ganen hasta 400.000 pesos argentinos (unos 1.142 dólares); la eliminación del impuesto a las ganancias para trabajadores y empleados con salarios altos, y la devolución del 21 por ciento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) para más de 21 millones personas.

Esta última decisión abarca en detalle a unos 9 millones de trabajadores que cobran salarios de hasta 778.000 pesos (2.222 dólares), 7 millones de jubilados y pensionados; a 2,5 millones de beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) a 2,3 millones de contribuyentes independientes (monotributistas) y a más de 440.000 trabajadores de casas particulares.

Fuente: Xinhua

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