El presidente de Bolivia, Luis Arce, comenzó hoy lunes el pago del bono anual “Juancito Pinto” que este año beneficiará a más de 2,3 millones de estudiantes del nivel primario y secundario de instituciones públicas con el propósito de combatir la deserción escolar.
“Este bono ha servido para reducir, paulatinamente, la deserción escolar que era aguda, especialmente de las niñas y en las zonas rurales”, expresó Arce en el acto público llevado a cabo en la unidad educativa José Enrique Viaña de la ciudad de Potosí, en la región suroeste del país.
“Hoy, poco a poco y gradualmente, la deserción (…) en todas las unidades educativas va disminuyendo”, agregó el presidente boliviano.
De acuerdo con Arce, el bono educativo que consiste en un pago individual de 200 bolivianos (unos 29 dólares), ha demostrado ser una herramienta efectiva para mantener a los niños en las aulas.
El acto de entrega se replicó en los diferentes departamentos bolivianos, donde ministros participaron en las respectivas ceremonias, al tiempo que su pago se extenderá hasta el 2 de diciembre próximo.
El bono es financiado mediante las utilidades de 27 empresas públicas bolivianas, aunque cuando se implementó por primera ocasión, los recursos provinieron sobre todo de la nacionalización de los hidrocarburos.
Los recursos ascienden a 477 millones de bolivianos (unos 68,5 millones de dólares), financiados por las empresas estatales en colaboración con el Banco Unión y otras entidades financieras del país.
En 2022, la tasa de deserción escolar en Bolivia se situó en 1,16 por ciento, tras haber estado en 1,83 por ciento en 2017, según datos oficiales.
Fuente: Xinhua