El Burgo de Osma (Soria, Castilla y León). Situado en la provincia de Soria, este es un pueblo amurallado que esconde grandes tesoros de alto valor histórico, como la catedral de Nuestra Señora de la Asunción, construida entre los siglos XII y XVIII (en la imagen); el palacio episcopal de estilo gótico-flamenco, que data del siglo XVI, y la Universidad de Santa Catalina, de estilo renacentista. Pero, sin duda, la joya del municipio es su castillo, situado a las afueras del pueblo y que une El Burgo con Osma.
Durro (Lleida, Cataluña). Este pequeño (muy pequeño, apenas tiene 100 habitantes) pueblo se encuentra en la Vall de Boí, en el Pirineo catalán, así que el entorno natural ayuda a resaltar su belleza. Decenas de casas de distintas formas y alturas con muros de piedra y tejados de pizarra negra componen un conjunto medieval impresionante. Entre ellas destaca la iglesia de la Natividad de la Madre Dios de Durro, una iglesia románica del siglo XII declarada patrimonio mundial de la Unesco en el año 2000, dentro del conjunto de las iglesias románicas del valle. En su término se encuentra la ermita de San Quirce, también del siglo XII y también patrimonio mundial. Está situada en una colina cercana (se puede subir a pie o en coche), desde donde se puede disfrutar de unas vistas impresionantes.ALAMY STOCK PHOTO
Artiés (Lleida, Cataluña). El nombre de Artiés es de origen vasco y significa “llano entre dos aguas”. Su ubicación explica su toponimia, pues este pueblo se alza entre los ríos Valarties y Garona, en un pequeño ensanchamiento del valle de Arán, a unos siete kilómetros de la estación de esquí de Baqueira Beret. Pero este no es un destino solo para deportistas: tiene un valor cultural propio, es un pueblo armonioso en el que destaca su iglesia parroquial de Santa María de Arties, una construcción románica del siglo XI al XII. Un poco más moderna es la iglesia de San Juan, pero no mucho más. Su estilo gótico sirve para darnos una pista. Esta joya arquitectónica es de principios del siglo XIV, pero las exposiciones que se organizan en su interior le dan un toque más contemporáneo.ALAMY STOCK PHOTO
Garós (Lleida, Cataluña). Entre las montañas del Pirineo catalán se encuentra este pueblo situado en la ruta del Alto Arán. Una villa montañera que apenas cuenta con 100 habitantes y que ha sabido hacer de ello una virtud. Ofrece un turismo patrimonial y de naturaleza para aquellos que quieran huir de las grandes aglomeraciones y multitudes. Uno de sus principales atractivos son sus calles, que ayudan a descubrir la arquitectura de la zona. Destaca su iglesia parroquial de San Julián, construida en el siglo XII. Además, para los amantes del esquí, a menos de tres kilómetros se encuentra la estación de Baqueira Beret.ALAMY STOCK PHOTO
Castrojeriz (Burgos, Castilla y León). Muchos de los peregrinos que han hecho entero el Camino Francés a Santiago de Compostela han pasado la noche en alguno de los ocho albergues (incluido el municipal) de esta localidad burgalesa antes de emprender la siguiente etapa, de 25,4 kilómetros, hasta Frómista (Palencia). El pueblo se encuentra a los pies de un imponente castillo en ruinas (en la imagen), que habla de la importancia que tuvo en la ruta jacobea este enclave durante la Edad Media. En Castrojeriz también destacan el palacio de los Condes de Castro, de estilo gótico, y la iglesia románica de la Virgen del Manzano, del siglo XIII, que actualmente alberga el Museo de Arte Sacro.ANDREA PISTOLESI (GETTY IMAGES)
Trevélez (Granada, Andalucía). Ubicado en el corazón de Sierra Nevada y en lo más alto de la Alpujarra granadina, y a menos de 100 kilómetros de la ciudad de Granada, Trevélez está considerado uno de los pueblos con más historia de la península Ibérica: hay restos de asentamientos neolíticos y fue uno de los asentamientos moriscos que desencadenó la Guerra de Rebelión de los Moriscos, entre 1568 y 1571. La localidad, de algo más de 700 habitantes, está rodeada de naturaleza y cuenta con más de 14 rutas de senderismo para todos los niveles. Además de ser conocida por sus secaderos de jamones, la belleza de este enclave reside en monumentos como la iglesia de San Benito o la Ermita de San Antonio y de La Virgen de Las Nieves.
Fuente : ElPais