El 9,3% de la población de la Unión Europea (UE) no pudo mantener su hogar lo suficientemente caliente en 2022. El salto porcentual con respecto al año anterior es de 2,4 puntos pero mirando hacia atrás, sobre el dato de 2015 el nivel se mantiene prácticamente sin variaciones. No es el caso de España. El año pasado, el porcentaje de personas con dificultades para mantener la vivienda a una temperatura óptima ascendió al 17,1%, casi tres puntos más que en 2021 y un 6,5% más que en 2015; en ningún otro país subió tanto en esos ocho años.
España no es el país con el porcentaje más elevado de personas que no podían mantener su hogar adecuadamente caliente. En datos de Eurostat, en 2022 lideró el listado Bulgaria, con un 22,5%, y le siguieron Chipre (19,2%), Grecia (18,7%), Lituania y Portugal, ambos 17,5% justo por delante de nuestro país. Sin embargo, la evolución de todos esos países es descendente mientras que en el caso español, el porcentaje de población con dificultades para mantener una temperatura óptima en el inmueble no solo va en aumento (casi duplica la media europea) sino que es el que más ha repuntado entre los 27 desde 2015.
Tomando el ejemplo Bulgaria, tras el 22,5% que le sitúa líder del la estadística europea se esconde una notable mejoría ya que en 2015 los hogares con problemas para calentar su vivienda suponían el 39,2%; un 16,7% menos en siete años. Chipre, también en peor posición que España, logra la segunda mejor senda de descensos, al pasar del 28,3% en 2015 al 19,2% el año pasado (-9,1%).
La evolución en España es a la inversa y en ese mismo periodo de tiempo las familias con dificultades en esta cuestión han aumentado un 6,5%. La Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) correspondiente a 2022 del Instituto Nacional de Estadística (INE) recogió un aumento de las dificultades económicas en los hogares el año pasado. Poner la calefacción pasó a ser un ‘lujo’ para el 17,1% de las familias ante un mayor estrés de los gastos habituales.
Francia es el segundo país con mayor aumento porcentual del número de hogares con imposibilidad de mantener el calor en la vivienda tras saltar desde el 5,5% en 2015 al 10,9% en 2022. De los 27 (no hay datos de Islandia, Noruega y Suiza), sólo en 11 tendencia es al alza.
Además de en España y Francia, el porcentaje de hogares con dificultados ascendió en otros nueve países, aunque en menor proporción y con tasas finales muy por debajo: Alemania (+2,5%, hasta el 6,6% de población con dificultades en 2022), Países Bajos (+2,4%, hasta el 5,3%), Suecia y Rumanía (+2,1%, hasta el 3,3% y 15,2% respectivamente), Dinamarca (+1,5%, hasta el 5,1%), Estonia (+1,4%, hasta el 3,4%), Eslovaquia (1,3%, al 7,1%), Luxemburgo (+1,2%, hasta el 2,1%) y Austria (+0,1%, hasta el 2,7%).
El ejemplo opuesto es Finlandia. El país contaba en 2022 con la menor proporción de población con problemas para poner la calefacción (1,4%) y, además, la evolución es positiva, al bajar tres décimas desde 2015.
Fuente: El Economista